Según los últimos estudios, para lograr la mejor “performance” durante el sexo, lo mejor es ir regularmente al gimnasio. ¿La razón?.
La actividad física es buena para la salud y también para incrementar el placer.
El sexo y el ejercicio están íntimamente vinculados. Están son las claves por las que tus visitas al gimnasio tengan aún más éxito.
1.Incrementa la excitación. Cuanto más ejercicio hace una persona, más limpias estarán las arterias. Por lo tanto, la sangre correrá más libremente. En el caso de los hombres, un mayor flujo sanguíneo se traduce en una mayor erección.
2.Aumenta la testosterona. Levantar pesas, hacer esfuerzo controlado en el gimnasio, una buena sesión en la elíptica… todo esto hace crecer los niveles de la hormona masculina, y por lo tanto mejorar tu capacidad sexual, sentirte mejor… todo lo que controla esta hormona.
3.Mantiene la erección. Según una investigación de la universidad de Harvard (Masachussets, EEUU) en 31.000 sujetos reveló que aquellos acostumbrados a hacer ejercicio vigorosamente durante 20 o 30 minutos diarios tenían 30% menos posibilidades de presentar disfunción eréctil.
4.Produce mayor resistencia. Mientras mejor forma física tenga el hombre, más durará en la cama. En la mayoría de las posiciones sexuales, el hombre necesita empujar y, por lo tanto, tener músculos fuertes y resistentes hará que el acto sea más placentero.
5. Te hace sentir mucho más atractivo. Todo entra por los ojos, dicen. Cuerpos bien cuidados son el estándar de belleza actual. Si el hombre piensa que luce bien, tendrá más confianza en sí mismo. Es posible que ese factor sicológico influya en el desempeño bajo las sábanas.
