El hipogonadismo masculino es una afección por la que el cuerpo no produce la suficiente cantidad de testosterona, hormona que desempeña un papel clave en el crecimiento y desarrollo masculino durante la pubertad, o la suficiente cantidad de espermatozoides.
Es posible que se de en diferentes situaciones: un hombre puede nacer con hipogonadismo masculino o puede presentarse más tarde en su vida, lo que suele suceder tras una infección o una lesión. Los efectos dependen de la causa y del momento de la vida en el que se dé.
El hipogonadismo de inicio tardío se da a partir de los 40 años, teniendo como consecuencia la pérdida en la calidad de la erección.
Las complicaciones, si no se trata, pueden ser distintas, así como el momento en el que haya aparecido:
- Genitales anormales
- Mamas masculinas agrandadas (ginecomastia)
- Infertilidad
- Disfunción eréctil
- Osteoporosis
- Baja autoestima
Para diagnosticarlo se pueden realizar una serie de pruebas, entre las que destacan:
- La comprobación de niveles de estrógenos en mujeres y de testosterona en hombres
- Medir algunas hormonas determinadas
- Análisis de sangre
- Pruebas genéticas
En los hombres adultos, el hipogonadismo puede alterar ciertas características físicas masculinas y perjudicar la actividad reproductiva normal. Los síntomas suelen ser la disminución del deseo sexual y de la energía o la depresión.
Con el tiempo, los hombres que lo padecen pueden desarrollar:
- Disfunción eréctil
- Esterilidad
- Disminución del crecimiento de vello en la cara y el cuerpo
- Disminución de la masa muscular
- Desarrollo de tejido mamario (ginecomastia)
- Pérdida de masa ósea (osteoporosis)
Si es grave, puede llegar a causar cambios mentales y emocionales, ya que al disminuir la testosterona, podemos vernos afectados por síntomas parecidos a los de la menopausia en las mujeres, como la dificultad para concentrarnos o los calores.
En The Test ayudamos a estos pacientes con tratamientos integrales multidisciplinares a recuperar su salud sexual.
